Diversas obras de mejora y adecuación de accesos y pistas mantienen una frenética actividad en el aeropuerto de Ciudad Real

La empresa propietaria del aeropuerto de Ciudad Real (Ciudad Real International Airport) está realizando estos días una serie de obras de mejora. Las instalaciones del aeropuerto y los accesos al mismo serán mejorados de cara a la inauguración que probablemente ocurra en septiembre.

Todo el personal técnico de la empresa esté realizando una frenética actividad para que las mejoras y cambios estén operativos al iniciar la actividad.

Así, se van a eliminar los separadores rojos y blancos (New Jersey) existentes en los accesos, y se sustituirán por guardarraíles de metal o biondas. Éstas darán un aspecto más moderno y funcional y mejorarán el acceso a las diversas zonas del aeropuerto.

También se realizará una nueva rotonda que dé acceso a la terminal de pasajeros y a la zona logística. Antiguos viales que habían quedado sin finalizar en la anterior etapa se terminarán.

Para más adelante se completará el acceso directo a la terminal de pasajeros que se inició coincidiendo con las obras de vaciado del hangar. El hangar que se ha decidido trasladar a otra ubicación dentro del aeropuerto.

También, y como ocurrió con las obras anteriores, son empresas de la provincia como Iberfirmes de Daimiel, Parros de Bolaños o Barahona de Moral de Calatrava, entre otras, las que están acometiendo estos trabajos.

Así, también se ha pavimentado al final de la pista 28. La zona, más amplia, permitirá que aviones de gran envergadura del tipo A-380 o 747 puedan hacer un giro a izquierdas con total seguridad.

De la misma forma, ya está previsto que una vez AESA comunique la reanudación de los vuelos, un equipo de pintura se encargue, 24 horas antes de la entrada el servicio de las pistas, del borrado de las grandes equis que establecían su clausura.

El día 4 de septiembre tendrá lugar el simulacro de accidente aéreo. Se pondrán a punto y comprobarán el funcionamiento y la coordinación de todos los servicios de protección, seguridad y emergencias.

En definitiva, una amplia variedad de iniciativas y obras que se están acometiendo estos días en la infraestructura y que conducirán a la apertura al tráfico aéreo del aeropuerto de Ciudad Real, tras un largo ciclo de clausura que ha durado casi 10 años.